La contaminación ambiental en Cuba es el resultado de las malas políticas del gobierno que al controlarlo todo no permite que la libertad individual genere progreso y resulelva los problemas de la población. Las enfermedades, la insalubridad, el daño al ecosistema, y la pobreza son algunas de las consecuencias de la mala administración del gobierno cubano. No se puede vender la imagen de que Cuba protege el medioambiente porque es una mentira. Esta es la realidad presentada por quien la sufre: el pueblo cubano.
¿Cómo es la vida de un joven cubano en la actualidad? El régimen quiso crear un “hombre nuevo”, pero el resultado ha sido inversamente proporcional a ese plan. La juventud cubana hoy por hoy es víctima de apartheid por ser cubanos y haber nacido en un país sin libertad, sin justicia, y sin esperanza. Les limitan las posibilidades de desarrollo individual, les controlan las oportunidades naturales de inventiva, los reprimen, los encarcelan, los maltratan, los asfixian. Miles se encuentran en prisión, otros permanecen resistiendo para ayudar a sus mayores, otros deciden jugarse la vida en el Estrecho de la Florida, o atravesando fronteras para lograr ser libres, otros luchan por un futuro mejor dentro de Cuba.
De acuerdo a la narrativa oficial Cuba es una potencia médica. La realidad dice lo contrario. En Cuba existe asistencia médica para los extranjeros que pagan en dólares, pero para el pueblo no hay médicos, no hay medicamentos y las personas, jóvenes y viejas, mueren sin la atención que necesitan. Los médicos son enviados a otros países a trabajar sin recibir la remuneración adecuada, convirtiéndose en esclavos del sistema y dejando al pueblo de Cuba sin atención. Esta es la realidad narrada por los que la sufren en la Isla.